La celebración de la fiesta de San Juan conmemora el nacimiento de San Juan Bautista. Esta fiesta es en realidad la cristianización de la fiesta pagana del solsticio de verano. En el hemisferio norte, tras el día más largo del año es cuando el sol comienza a descender en el horizonte y los días empiezan a hacerse más cortos.
Secularmente, la celebración de la víspera de San Juan está rodeada de magia y superstición que impregnan cada rincón de la geografía almeriense, dándole formalmente la bienvenida al verano. Es tanto el fervor por esta fiesta que todo el litoral de Almería se ilumina esa noche con la luz del fuego de las hogueras haciendo visible la silueta de la provincia desde el cielo.
Prosperidad y salud para todos
Aunque los almerienses son en su mayoría devotos católicos, siguen esta tradición de origen ancestral y pagano, realizando hogueras en torno a las que se reúnen, existiendo la costumbre de saltar los rescoldos y de bañarse en las playas a medianoche, o por lo menos se mojarse los pies y la cara, bajo la creencia de estas acciones permitirán tener más salud y suerte durante el año.
Además del agua y el fuego, el principal protagonista de esta fiesta tradicional es el olor de las brasas, que inunda cada rincón de los pueblos y ciudades de Almería.
La familia y los amigos suelen reunirse en las playas y hacer sus hogueras, saltando tres veces sobre el fuego para ahuyentar la mala suerte.
La ocasión es propicia para quemar cosas viejas como símbolo de purificación, dejando atrás lo pasado y renovándose.
El litoral de Almería se llena de espectáculos pirotécnicos, moragas, sardinadas, conciertos, recitales, mercadillos artesanales y fiestas en cada municipio para celebrar el solsticio de verano.
Pero la fiesta no sólo es a la orilla del mar, en muchos pueblos del interior de la provincia de Almería, como
Abla, esta noche se conoce como la “del agua”, pues los participantes en la fiesta echan agua entre sí para atraer la abundancia durante el resto del año. En otras localidades lejos de la costa los vecinos se bañan en piscinas o albercas, haciendo formar parte al agua de sus ritos de prosperidad. Las hogueras son populares también en los pueblos del interior de Almería, siendo especialmente conocidas las del Barrio de las Zorreras de
Huércal de Almería y las populares verbenas que se organizan anualmente en
Senés.
Magia en la Catedral de Almería
La
Catedral de Almería se convierte, para la noche de San Juan, en el centro de una mítica leyenda, según la cual justo a la media noche de ese día aparecerán dos personajes, uno pequeño vestido con chilaba blanca y otro gigante de piel oscura y con un solo ojo, que guiarán a los que logren verlos hasta la desaparecida Torre de Arcas en donde descansa en su eterno letargo la princesa mora Galiana.
Según la leyenda si se logra entrar a la torre, no se puede hacer el mínimo ruido para que la princesa no despierte, y se podrá ver el gran tesoro compuesto por joyas y monedas de oro y hasta se podrá tomar alguno que otro de esos preciosos objetos, sin ser codiciosos, de lo contrario el visitante quedará preso eternamente haciendo compañía a la princesa mora.