La Sierra de Gádor es un complejo montañoso que se extiende 52 kilómetros por el sur-occidente de la provincia de Almería, concretamente por los términos municipales de Felix, Enix, Gádor, Alhama de Almería, Alicún, Huécija, Íllar, Instinción, Rágol, Fondón, Laujar de Andarax, Alcolea, Berja, Dalías y Vícar.
En este macizo, cuya cota más alta se encuentra en la cumbre del Morrón de la Launilla con 2.249 metros, se encuentra una gran riqueza de flora y fauna, con muchos especímenes propios de la zona, que han llamado la atención de los investigadores en la materia.
Las principales masas forestales que se encuentran en la Sierra de Gádor están compuestas por pinares procedentes de las repoblaciones del último tercio del pasado siglo, aunque aún es posible encontrar encinares y, en las zonas más húmedas, bosquetes de áceres y quejigos. En las cumbres predomina el piornal. Entre esta rica y variada flora son de destacar algunos endemismos exclusivos de la Sierra de Gádor, como el
Coronopus navasii o el
Astragalus tremolsianus.
Respecto a la fauna, el grupo más numeroso es el de los invertebrados, destacando por su importancia las mariposas, estando esta sierra catalogada como Zona de Especial Interés Lepidopteróligo. La mariposa Apolo de la Sierra de Gádor (
Parnassius apollo gadorensis) es una de las especies más emblemáticas de la zona; igualmente está el caracol “chapa”, una especie endémica de la Sierra de Gádor cuya población se ha visto últimamente muy reducida, principalmente por culpa del hombre.
La presencia de más de 130 especies diferentes de aves, hace de esta sierra una de las zonas de más ricas en ornitofauna de la provincia de Almería.
Destacan las rapaces como el búho real, el búho chico, la lechuza campestre, el águila real, el águila perdicera, el alcotán, el esmerejón o el cernícalo vulgar.
Entre los mamíferos, la presencia más significativa es la cabra montesa, procedente de la vecina Sierra Nevada. Mucho más numeroso es el jabalí que se distribuye por todo el territorio. Dentro de los pequeños predadores, junto al amenazado gato montés, abundan zorros, ginetas, comadrejas y tejones.
En las minas abandonadas es frecuente ver y escuchar a los murciélagos. Los camaleones también forman parte de la impresionante fauna de esta sierra tan hermosa de Almería.
En la Sierra de Gádor existen numerosos restos de antiguas minas de extracción de materiales, principalmente plomo y plata, que fueron abandonadas en la segunda mitad del siglo XX, pero que en su día tuvieron una gran importancia y fueron el detonante del gran aumento de la población que se produjo en la zona, especialmente en Berja, a principios del siglo XIX.
La Sierra de Gádor ofrece una vista y una interacción fantástica con la naturaleza, lo que se ha hecho acreedora del gusto de cientos de turistas, deportistas y amantes del senderismo, que escogen cualquiera de las rutas disponibles para disfrutar de la belleza natural que ofrece la sierra.
La Sierra de Gádor es particularmente apreciada durante el invierno nevado, debido a la gran belleza que ofrece su paisaje cubierto de blanco, del que existen fotografías innumerables. La riqueza de su paisaje responde a su gran extensión, colindando al norte con Sierra Nevada, al sur con el mar Mediterráneo, al este con Sierra Alhamilla y al oeste con la Sierra de la Contraviesa, otorgándole un paisaje y una diversidad de animales y plantas, que va variando conforme cambia el paisaje, la temperatura y las características de la sierra en ese punto en particular.
A sus pies se encuentra la comarca del Poniente Almeriense, tradicionalmente llamada el Campo de Dalías.