Pese a que el Castillo de Oria no cuenta con un proyecto de restauración, debido a su avanzado estado de deterioro, la iniciativa ha sido crear alternativas que permitan a los visitantes tener un más fácil acceso y una mejor vista del edificio defensivo.
Así, se ha creado una ruta que permita a los turistas llegar de forma más sencilla hasta las ruinas del castillo, pero también apreciar un poco el entorno, ofreciéndole para ello una vista privilegiada del contexto de la fortificación.
Así nació un mirador y un parque, que hace que la visita al castillo pueda convertirse en una experiencia plena y divertida, de fácil acceso y con una vista sin igual.
Este proyecto permitió la instalación de dos plataformas en el sitio donde anteriormente se elevaban las hoy extintas torres del castillo, de forma que la persona que se sube a ellas, pueda apreciar de mejor manera las ruinas del castillo y le ofrece además un ángulo fantástico para la realización de fotografías, uno de las prácticas favoritas de los visitantes de este punto turístico e histórico de Oria.