La Isleta del Moro es uno de esos lugares de la provincia de Almería en donde se ha detenido en el tiempo, lo que otorga a toda la zona un encanto muy especial.
Visitar la Isleta del Moro es reencontrarse con los pescadores, las barcas cerca de la playa, las casas blancas y la extraordinaria paz que se mantiene durante la mayor parte del año, y que solo se interrumpe durante los meses del verano.
En la bellísima Isleta del Moro es imprescindible sentarse a observar detenidamente las preciosas vistas y escuchar con atención el sonido del mar. Observar a los pescadores en su rutina diaria, mirar al pueblo para disfrutar de las antiguas y modestas casas blancas de los pescadores que están ubicadas en la primera línea de mar.
También hay una gran variedad de actividades para disfrutar. Entre ellas destacan el buceo, el senderismo y la visita a las diversas playas de la zona.
No podemos perder la oportunidad de sumergirnos en sus aguas cristalinas y disfrutar del buceo, ya que aquí podemos encontrar uno de los fondos marinos de mayor calidad de toda la provincia de Almería, con una variedad de escenas marinas que harán las delicicias de los amantes del buceo.
El buceo es de altísima calidad ya que en el Parque Natural se pueden encontrar hasta 12.000 hectáreas protegidas con una gran biodiversidad, que hacen de esta actividad una experiencia única y memorable.
De hecho, hay un área de protección marítima de 45 kilómetros de costa que fue declarada como tal en el año 1995.
Las actividades de senderismo son relativamente fáciles y aptas para todas las personas. Por ejemplo, el sendero La Isleta del Moro - Los Escullos, de 1,6 kilómetros, te llevará a lugares espectaculares donde podrás visitar playas como la playa del Arco, con dunas fosilizadas y arenas finas.
En sus playas se descansa y se disfruta al sol, lo cual puede ser alternado con visitas al pueblo y a sus dos miradores, destancando el mirador de la Amatista, uno de los más bonitos y espectaculares del Parque Natural Cabo de Gata-Níjar.
También debe disfrutarse la conexión con los lugareños, gente abierta y receptiva; y a degustar la gastronomía de la zona que está basada en los productos del mar. Algunos de los platos caseros de la zona incluyen la fritura del pescado, una caldereta o el pescado a la plancha.
Las principales actividades económicas en la Isleta del Moro incluyen el turismo ecológico, el cual se viene practicando de forma incrementada en los últimos 20 años y, aunque de manera marginal, la pesca que se practica localmente y surte a los principales restaurantes visitados por los turistas, quienes disfrutan de productos del mar indudablemente frescos.
La devoción a la patrona la Virgen del Carmen se festeja con una vistosa procesión a lo largo de la bahía de la Isleta del Moro, transportando la imagen de la Virgen en una traína. En su travesía es acompañada por vecinos y visitantes que pueden compartir esta experiencia tanto por tierra como por mar.
De hecho, hay un área de protección marítima de 45 kilómetros de costa que fue declarada como tal en el año 1995.
