En la Alpujarra, dividida entre las provincias de Granada y Almería, se localizan diversos castañares, unos más grandes que otros, destacando entre ellos el bien conservado Castañar de Paterna del Río, en la provincia de Almería, identificado así por su adyacencia a esta localidad.
El Castañar de Paterna del Río está catalogado como ‘Arboleda singular de Andalucía’ y puede recorrerse, admirarse y disfrutarse a través del sendero que lo recorre, a menudo adyacente a la acequia que da nombre al sendero, la Senda del Agua.
El caminante se topará en esta ruta con una variada vegetación donde prima el castaño, pero también encontrará otras especies como álamos, encinas y pinos. La ruta nos adentra en un exquisito ambiente natural, un hermoso valle formado por el río Alcolea y sus afluentes. Durante el otoño, las ya de por sí excelentes vistas se ven amplificadas por el colorido típico de las hojas de las distintas especies arbóreas.
Durante el recorrido, el castañar se va haciendo más frondoso hasta que el sendero llega a un rincón donde se cruzará con una zona de vegetación muy espesa, bajando por un terreno bastante resbaladizo hasta el cauce de un arroyo que se cruza por un pequeño puente de madera.
El sendero está catalogado como de dificultad media pero, sobre todo al inicio, tiene unas fuertes subidas.
Consta de poco más de 12 kilómetros que pueden recorrerse en unas seis horas a ritmo tranquilo y haciendo una pausa para reponer fuerzas.
Encontraremos a lo largo del mismo maravillosas vistas panorámicas de Paterna del Río, las numerosas terrazas de cultivo y por supuesto el atractivo bosque del castañar.
Resulta un excelente paseo donde el agua transita por la típica y tradicional acequia del paisaje alpujarreño y acompaña casi siempre durante el recorrido. Debe señalarse que estas acequias son claves en el surgimiento desarrollo y mantenimiento de paisajes rurales de extraordinaria belleza como son los regadíos de la Alpujarra Alta. Han logrado mantener un buen nivel de humedad del suelo, provocando el ambiente propicio para la presencia de especies como el castaño.
Características del Castaño
El castaño es ampliamente apreciado por sus dones. Sus exquisitos frutos comestibles, las castañas, se pueden consumir crudas o asadas y han sido un alimento básico a través de la historia en muchas latitudes.
En noviembre el castaño entrega su sabroso fruto para alegría y disfrute de animales en el bosque y el anhelado consumo por parte de seres humanos. También sus hojas son apreciadas por sus aportes medicinales. Como antidiarreico, astringente, antipirético, expectorante, antitusivo y antirreumático.
Por otra parte, su fuerte madera se usa en suelos y techos de viviendas, vigas en la construcción, fabricación de muebles, barriles, popularizándose su empleo en la elaboración de bicheros para la pesca de atún, entre muchos otros usos.
El castaño requiere de climas sin grandes extremos. No requiere de mucha agua, pero si suficiente para su desarrollo, crecimiento y producción de castañas ya que es extremadamente sensible a las sequías y fuertes heladas. Le favorecen los terrenos silíceos, pero es intolerante a los calizos. Se adapta a los ambientes con sombras suaves, no permanentes ya que requiere de calor en el verano para formar sus frutos.
