¿Deseas conocer un lugar mágico? Te presentamos el Peñón de la Encantá, ubicado en el municipio de
Las Tres Villas, conformado por las poblaciones de Escúllar, Doña María y Ocaña, justo en el corazón del
Parque Nacional de Sierra Nevada.
Está localizado en un lugar privilegiado dentro del Paraje de Santillana, donde se llega tras realizar un paseo inigualable en el que también conocerás las legendarias historias de bandidos, hadas y tesoros escondidos.
El Peñón de la Encantá es todo un monumento natural que llama mucho la atención, localizado en la población de Santillana, que, aunque deshabitada, cuenta todavía con edificaciones de barro y tierra.
Desde él, una vista panorámica excepcional te mostrará la belleza y majestuosidad del Barranco de Santillana. Pero el principal atractivo es, sin lugar a dudas, la mágica historia que esconde y que ha convertido el lugar en el destino de miles de curiosos y turistas durante todo el año.
La leyenda habla de una mujer hermosísima, de piel blanca y cabellos muy largos de oro que habitaba en el peñón, y que salía al encuentro de pastores y caminantes durante las noches de luna clara. Cantaba bellas melodías que hipnotizaban hasta tal punto que quien la escuchaba perdía la cabeza.
Fue precisamente esta historia, que ha perdurado durante muchos años, de donde surge el nombre de la Encantá.
Las Tres Villas
Visitar Las Tres Villas es una invitación directa hasta el Peñón de la Encantá. El camino se realiza por un sendero en forma de rambla, por el que se ascenderá hasta la ya mencionada población de Santillana.
Este sendero también guarda sus secretos a voces, pues se dice que fue utilizado para transportar mercancía por toda la sierra. Era, según los historiadores, el único paso disponible que había cuando el resto de los caminos no estaban en condiciones, tras la nieve de la temporada invernal.
Justamente este sendero era el preferido para el contrabando de algunos productos en la época de la postguerra: la uva, al igual que el cable de mineral de las grandes minas de Beires, era transportada por este camino hasta la estación de tren que estaba ubicada en la población de Doña María.
Las Tres Villas también representa un gran atractivo turístico para miles de visitantes. Pasear por sus estrechas calles y observar con detenimiento sus construcciones representa todo un ejercicio de tranquilidad.
Las casas conservan sus fachadas blancas y sus techos de pizarra, perfectos para cuando cae nieve durante el invierno. Hay muchas otras cosas que se pueden visitar en esta zona, como por ejemplo, el vagón de un tren ubicado en Doña María, un ferrocarril que pasa por una rambla en la población de Escúllar o la iglesia de San Bernardo localizado en la ciudad de Ocaña.
En líneas generales, en Las Tres Villas predomina una gran tranquilidad que los amantes de la naturaleza podrán disfrutar plenamente.
No desaproveches la oportunidad de visitar Las Tres Villas y por supuesto, el Peñón de la Encantá, donde disfrutarás de un fantástico paseo lleno de historias y leyendas.
Si aún no lo conoces, te invitamos a visitar este lugar de paisajes hermosos fantásticas vistas.
¡Te va a encartar!